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Quiero ser tu pino señor

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Esta Navidad quiero ser tu pino, Señor. Un pino sencillo de los que nacen en las sierras, pero con unas ramas verdes y frescas, alimentado por la sabia de tu vida divina. Como un reflejo tuyo, mi forma será triangular, signo de la Santísima Trinidad y si una rama sobresale demasiado, hazme sensible para cortarla a tiempo antes de que me deforme demasiado. Empezaré a limpiar mi tronco y mis ramas, de todo musgo o heno que tenga. Y así poco a poco quitaré todo lo que me estorba; mi egoísmo, mis envidias, mis incomprensiones, mi orgullo, mi soberbia, que como "plaga" crecen sin que yo me dé cuenta. Como un recuerdo de todas las estrellas que brillaron esa noche bendita en que tú naciste, me llenaré de foquitos de colores para reflejar a los demás la alegría de tú venida al mundo. Escogeré unas esferas doradas, las más brillantes para que representen todas mis ALABANZAS, por el sol que sale cada día, por las estrellas, por los atardeceres tan hermosos, y por todas las m...

Mantente erguido

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En la dicha o en la angustia, en miseria o en riqueza, en salud o enfermedad, mantente erguido y sonríe. Ante quienes se abalanzan, o se echan al vacío, o se hieren mutuamente, mantente erguido y sonríe. Y si avanzan a codazos, y ávidos tienden la mano o se ocultan al acecho, mantente erguido y sonríe. Ante aquellos que disputan, ante aquellos que se injurian, y los que cierran los puños, y los que apuntan sus armas, mantente erguido y sonríe. En el día de la ira y de la desbandada, cuando todo cae y arde; solo, en medio del pavor, mantente erguido y sonríe. Ante justos cuellitiesos, ante jueces implacables, y afanosos personajes, mantente erguido y sonríe. Cuando oigas tu alabanza, o te escupan en la cara, mantente erguido y sonríe. Y si estás entre los tuyos, mantente erguido y sonríe. Y delante de tu amada, mantente erguido y sonríe. En los juegos y en las danzas, mantente erguido y sonríe. En vigilias y en ayunos, mantente erguido y sonríe. Solo, en el alto silencio, ...